Seguimos con los comentarios de nuestras lecturas. En este caso hablamos de un libro de investigación histórica editado por Alianza Universidad en 1994. Se trata de un libro amplio con la colaboración de numerosos estudiosos dirigidos por Nigel Townson. Podremos trastear el origen de las ideas republicanas en nuestro país desde principios del siglo XIX hasta la transición democrática.
Son de especial interés, al menos para nosotros, que nos dedicamos a la investigación de la Segunda República Española, los apartados dedicados a la Restauración, las primeras décadas del siglo XX y la Segunda República. Para ello se utilizan capítulos llamados La Larga noche de la Restauración, 1875-1900, de Carlos Dardé, La quiebra del republicanismo histórico, 1898-1931 de Manuel Sánchez Cortina y La experiencia en el poder. la izquierda republicana 1931-1933, de Santos Juliá.
Con esos tres capítulos podemos ver cómo las ideas republicanas van virando del republicanismo histórico a un neo-republicanismo en el siglo XX que intenta transformar sus estructuras, que ya venían heredadas del antiguo Partido Progresista. La evolución, sobre todo, a principios del siglo XX, desde una conjunción republicano- socialista con Unión Republicana hasta la ruptura con dos partidos nuevos, las tendencias Reformista y Radical, que serán las que vayan tomando posiciones nuevas, nos hará recapacitar sobre esta tendencia política hasta llegar a su crisis durante la Dictadura de Primo de Rivera y su posterior auge tras el Pacto de San Sebastián que llevaría a las fuerzas antidinásticas a hacerse con el poder tras las elecciones municipales de abril de 1931.
El libro también aporta numerosos datos de interés sobre los orígenes republicanos durante el reinado de Isabel II y como se llega a la I República, que fracasaría por la división de ideologías y planteamientos que es notoria desde la revolución de 1868.
Las posturas más moderadas del Partido Radical durante la Segunda República serán objeto de estudio de Nigel Townson en un capítulo propio. También existen capítulos propios a la integración en Europa y a la cultura republicana.
Realmente la distribución aparece en bloques, el primero dedicado al siglo XIX, el segundo al siglo XX hasta 1977, luego otro dedicado a la historia de las mentalidades y la articulación social y por último un cuarto bloque dedicado a las tradiciones y variedades locales. Según el interés del investigador, será más interesante uno u otro.
También es posible que la publicación sacie el ansia de saber de un lector no especialista, con capítulos científicos pero a la vez de una literatura sencilla. De momento, nosotros aprovechamos lo que hemos aprendido para utilizarlo en la redacción de nuestra tesis doctoral.